Novena a Santa Faustina Kowalska

Oraciones para cada día de la novena

En el Nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

Acto de Contrición:

Señor mío, Jesucristo, Dios y hombre verdadero, Creador, Padre, Redentor mío, por ser vos quien sois, bondad infinita, y por que os amo sobre todas las cosas, me pesa de todo corazón haberos ofendido, también me pesa porque podéis castigarme con las penas del infierno. Animado con tu Divina Gracia, propongo firmemente nunca mas pecar, confesarme y cumplir la penitencia que me fuera impuesta, para el perdón de mis pecados. Amén.

SÉPTIMO DÍA

El amor a la Iglesia – del Cuerpo Místico de Cristo

Jesús: “Hija mía, medita sobre la vida divina que se encuentra en la Iglesia para la salvación y la santificación de tu alma. Considera cómo aprovechas estos tesoros de gracias, estos esfuerzos de Mi amor.” (Diario 1758).

Santa Faustina: Me esfuerzo por la santidad, ya que con ella seré útil a la Iglesia. Hago continuos esfuerzos en las virtudes, procuro imitar fielmente a Jesús y esta serie de actos de virtud cotidianos, silenciosos, ocultos, casi imperceptibles, pero sí cumplidos con gran amor, los pongo en el tesoro de la Iglesia de Dios para el provecho común de las almas. Siento interiormente como si fuera responsable por todas las almas, siento claramente que vivo no solamente para mí, sino para toda la Iglesia… (Diario 1505).

Oración: Agradecido/A por todos los dones de la misericordia que Dios pone en la Iglesia, a mi disposición, quiero hacer uso de ellos como tú, Santa Faustina, para alcanzar la santidad y así llevar a otras almas hacia las fuentes de la misericordia de Dios.

Oración final para todos los días

Santa María Faustina, nos dijiste que tu misión continuaría después de tu muerte, y que no nos olvidarías (diario # 281, 1582). Nuestro Señor te concedió un gran privilegio cuando te dijo que distribuyeras las gracias como tú quisieras, a quien tú quisieras y cuando tú quisieras (diario # 31). Confiando en esta promesa, te pido tu intercesión por las gracias que necesito, especialmente por la conversión de todos los pecadores y (decir la intención personal).

Ayúdame, sobre todas las cosas, a confiar en Jesús como tú lo hiciste y así glorificar su Misericordia a cada instante de mi vida. Amén.

Se reza un Padre Nuestro, Ave María y Gloria.
Santa María Faustina, ruega por nosotros (tres veces…).